Contestamos a la pregunta ¿Qué son las Drogas? en el podcast Club 113 Experto en Dr0gas.
Ver vídeo completo del Podcast Club 113 Experto en Drogas aquí.
Transcripción:
Vamos a comenzar por definir qué es una droga y qué entra en la categoría de drogas. Por ejemplo, en Estados Unidos, si quieres comprar paracetamol, vas a una «drugstore» (farmacia). Al abrir el paraguas del término, ¿qué entra dentro de la categoría de drogas desde la perspectiva de un experto?
En inglés, el término «drug» se refiere a cualquier sustancia que tenga actividad farmacológica. Esto incluye desde ibuprofeno y paracetamol hasta aspirina y otras sustancias que produzcan algún cambio en el cuerpo, como aliviar un dolor o alterar una sensación. En general, cualquier sustancia que tenga efectos farmacológicos se considera una droga.
Sin embargo, en español, cuando hablamos de «drogas», generalmente nos referimos a drogas psicoactivas. Una droga psicoactiva es cualquier sustancia que tiene la capacidad de unirse a receptores en nuestras neuronas del sistema nervioso central (es decir, en el cerebro) y producir cambios en nuestra percepción, emociones o pensamientos. Por ejemplo, el café, que se une a los receptores de adenosina en el cerebro, puede hacer que te sientas más despierto y animado, cambiando tu estado de ánimo y tus emociones.
Así que, en efecto, todo lo mencionado son drogas. Dentro de esta categoría hay sustancias tanto legales como ilegales. No se trata solo de las drogas ilegales, como comúnmente se piensa. El café, el alcohol, el tabaco, y los psicofármacos, como los antidepresivos, también son drogas psicoactivas.
La cuestión de por qué algunas drogas son legales y otras no lo son, como en el caso del alcohol y el cannabis, es muy compleja. Aunque el factor económico juega un papel importante (por ejemplo, el alcohol genera grandes ingresos), hay múltiples factores históricos y culturales involucrados. Técnicamente, la ilegalidad de las drogas a menudo se basa en su riesgo objetivo, es decir, la peligrosidad de la sustancia. Esto se relaciona con cuán adictiva o tóxica puede ser. Sin embargo, en la práctica, esta relación no siempre es precisa.
La regulación de las drogas no siempre refleja su peligrosidad real. Los criterios culturales juegan un papel significativo. Por ejemplo, vivimos en una cultura que tiene raíces judeocristianas. El vino ha sido históricamente una parte importante de las prácticas religiosas en el Mediterráneo y ha sido integrado en la eucaristía como «la sangre de Cristo». Este uso histórico y cultural del alcohol ha hecho que sea percibido como algo más cercano y aceptable culturalmente. En contraste, otras sustancias que no tienen una conexión cultural o religiosa similar a menudo se perciben como más peligrosas o ajenas.
Además, la historia y el contexto también influyen. Casos de consumo problemático en diferentes regiones han llevado a la prohibición de ciertas sustancias. Por lo tanto, la clasificación de una droga como legal o ilegal no se basa únicamente en un factor único, sino en una combinación de aspectos culturales, históricos y contextuales.
El consumo de drogas, legales o ilegales, conlleva riesgos y no es recomendable. Sin embargo, si decides hacerlo, infórmate bien sobre la sustancia, su duración, efectos y dosificación. Utiliza servicios de reducción de riesgos como Energy Control (España), Dance Safe (USA), Kosmicare (Portugal) o Échele Cabeza (Colombia).
Recuerda que la información es poder y salud; la ignorancia es el mayor peligro al tratar con sustancias. Para apoyar esta iniciativa, sigue el canal en redes, comparte los videos o únete a la Comunidad Drogopedia para hacer preguntas, influir en los temas y acceder a contenido exclusivo. También puedes solicitar asesorías personales con Antón y unirte a nuestro canal de WhatsApp o Telegram para estar al tanto de todo.
¡Nos vemos!