Mientras las setas inducen un estado alterado de percepción y emociones profundas, el Tusi, al no tener una composición estandarizada, puede contener estimulantes (como MDMA o anfetaminas), disociativos (como ketamina) o adulterantes, lo que genera interacciones impredecibles y peligrosas tanto a nivel físico como psicológico.
Efectos cruzados: Cuando se combinan, los efectos impredecibles del Tusi y la intensidad emocional de las setas pueden amplificarse, lo que aumenta el riesgo de crisis psicológicas, confusión extrema y descontrol físico.
Sobrecarga sensorial y psicológica: Las setas ya generan una alteración significativa de la percepción y emociones. Si el Tusi contiene estimulantes como MDMA o anfetaminas, esto puede amplificar la experiencia sensorial, llevándola a un nivel abrumador que puede desencadenar ataques de pánico, paranoia o psicosis.
Descontrol físico: Las setas pueden causar desorientación y pérdida de conexión con el entorno, mientras que el Tusi, dependiendo de su contenido (como ketamina), puede intensificar la pérdida de coordinación, aumentando el riesgo de accidentes o lesiones.
Riesgo cardiovascular: Si el Tusi contiene estimulantes, combinarlos con la psilocibina, que puede aumentar la frecuencia cardíaca y presión arterial, genera un estrés cardiovascular significativo, especialmente en personas con condiciones cardíacas preexistentes.
Imprevisibilidad química: La composición del Tusi puede variar ampliamente. Si contiene ketamina, esto puede generar un efecto depresor que entra en conflicto con los estados intensos de percepción y emoción inducidos por las setas, aumentando el riesgo de confusión y colapso mental.
Deshidratación y sobrecalentamiento: En contextos recreativos, el uso de estimulantes en el Tusi puede enmascarar la deshidratación o el sobrecalentamiento, agravando los riesgos físicos.
Riesgo de crisis psicológica prolongada: La psilocibina puede profundizar los efectos psicológicos del Tusi, lo que puede llevar a una experiencia mentalmente traumática y difícil de manejar, con episodios de ansiedad o paranoia severa.
Esta mezcla puede resultar en una experiencia psicológica y física abrumadora, con alto riesgo de crisis mental, descontrol físico y daño cardiovascular. Evitar esta combinación es esencial. Si alguien experimenta confusión extrema, ansiedad severa, desmayos o dificultad para respirar, debe buscar atención médica de inmediato.