Mezclar Benzodiacepinas y Popper tiene
un incremento del riesgo y debes tener especial cuidado.

Estas combinaciones no suelen ser físicamente dañinas, pero pueden producir efectos indeseables e inesperados, como malestar físico o sobreestimulación. El uso extremo puede causar problemas de salud física. Los efectos sinérgicos pueden ser impredecibles. Se debe tener precaución al optar por usar esta combinación.

Tipo de sustancias: Depresoras

En general, la mezcla de drogas suele aumentar los riesgos y efectos impredecibles, por lo que se desaconseja, pero en cualquier caso es crucial informarse bien de antemano para proteger la salud. Nos guiamos por esta categorización de riesgos.

Efectos y riesgos

Riesgos cardiovasculares: El popper puede causar una caída abrupta de la presión arterial. Las benzodiacepinas, aunque tienen un efecto leve sobre la presión arterial, pueden exacerbar este efecto en personas sensibles o con dosis altas.

Riesgo de sedación excesiva: Las benzodiacepinas inducen relajación y somnolencia. Combinadas con el mareo y la disminución de oxígeno inducida por el popper, esto puede aumentar el riesgo de pérdida de consciencia o colapso.

Riesgo de hipoxia: El popper puede reducir la capacidad de la sangre para transportar oxígeno (metahemoglobinemia), y aunque las benzodiacepinas no afectan directamente el transporte de oxígeno, su efecto depresor en la respiración podría agravar este riesgo.

Potencial de sedación profunda, lo que aumenta el riesgo de accidentes o caídas.

Mareos extremos, pérdida de coordinación o desmayos.

En casos extremos, la combinación podría exacerbar problemas respiratorios, aunque es menos común.

Mezclar popper y benzodiacepinas no es recomendable, ya que puede potenciar los efectos sedantes y aumentar el riesgo de colapso cardiovascular o pérdida de consciencia. Es mejor evitar esta combinación, especialmente en situaciones donde la seguridad y el entorno no están controlados.

¿Tienes experiencia con esta mezcla?

Si has utilizado esta mezcla antes, te invitamos a compartir tu experiencia. ¿Fue positiva o negativa?

Total: 0 experiencias

Drogopedia no se hace responsable de las opiniones aquí vertidas.

Benzodiacepinas

Benzodiacepinas

¿Qué son?

Son sustancias depresoras del sistema nervioso central que se utilizan principalmente para tratar la ansiedad, el insomnio, espasmos musculares y ciertos trastornos convulsivos. Producen relajación y una reducción de la tensión emocional, además de efectos sedantes en dosis más altas.

Efectos y Riesgos:

El uso prolongado o indebido puede generar tolerancia, dependencia y síntomas de abstinencia graves al suspenderlas. Entre los efectos secundarios comunes se incluyen somnolencia, deterioro cognitivo y pérdida de coordinación, lo que incrementa el riesgo de accidentes. Combinarlas con otros depresores puede amplificar peligrosamente la sedación y aumentar el riesgo de depresión respiratoria.

Principales Benzodiacepinas y Nombres Comerciales:

  • Diazepam: Valium, Stesolid, Relanium
  • Alprazolam: Xanax, Trankimazin, Tafil
  • Clonazepam: Klonopin, Rivotril
  • Bromazepam: Lexotanil, Lexotan, Lexomil
  • Clorazepato: Tranxilium, Tranxene
  • Midazolam: Dormicum, Hypnovel
  • Temazepam: Restoril, Normison
  • Flurazepam: Dalmane
  • Oxazepam: Serax, Serpax

Saber más

Popper

Popper

¿Qué es?

El término “popper” se refiere a una familia de sustancias químicas conocidas como nitratos de alquilo (como el nitrito de amilo o el nitrito de butilo). Estas sustancias se utilizan recreativamente mediante inhalación para producir un efecto rápido de relajación y euforia. Originalmente, los nitratos se desarrollaron para tratar problemas cardíacos como la angina de pecho.

Efectos y Riesgos:

El popper produce un efecto breve e intenso que dura entre 1 y 2 minutos, caracterizado por una sensación de calor, relajación muscular (especialmente en esfínteres) y aumento del flujo sanguíneo. También puede provocar mareos, enrojecimiento facial y sensación de euforia.

Los riesgos incluyen dolores de cabeza, náuseas, irritación de las vías respiratorias y desmayos debido a la caída repentina de la presión arterial. El uso frecuente puede causar quemaduras químicas en la piel y la nariz, y en casos raros, daños en el corazón o el cerebro por hipoxia (falta de oxígeno). Su uso combinado con medicamentos como el sildenafil (viagra) es extremadamente peligroso, ya que puede provocar colapsos cardiovasculares. Aunque no genera dependencia física, su uso repetido puede conllevar riesgos graves.

Saber más

Lo más buscado