Riesgo de deshidratación y desequilibrio de electrolitos: El LSD puede causar deshidratación, especialmente si se consume en grandes cantidades o en ambientes calurosos. Esta deshidratación puede ser perjudicial si se combina con metformina, ya que la función renal podría verse comprometida en situaciones de estrés metabólico o deshidratación. La metformina no suele causar deshidratación por sí misma, pero si el cuerpo está deshidratado debido al LSD, esto podría aumentar la presión sobre los riñones y potencialmente causar efectos adversos.
Efectos psicológicos: El LSD altera el estado de ánimo, las percepciones y la cognición, lo que puede generar experiencias emocionales intensas o incluso ansiedad o paranoia en algunas personas. Si una persona que toma metformina tiene dificultades para manejar estos efectos, especialmente si ya tiene un desequilibrio en los niveles de glucosa o problemas emocionales, los efectos negativos podrían verse exacerbados. Las fluctuaciones en los niveles de azúcar en sangre pueden interferir con la capacidad de lidiar con los efectos psicoactivos del LSD.
Riesgos metabólicos: El LSD puede afectar el metabolismo de diversas maneras, incluyendo el aumento de la temperatura corporal, lo que podría afectar la regulación de la glucosa y poner en estrés el cuerpo. La combinación de estos efectos metabólicos con la acción de la metformina podría generar una mayor carga sobre el sistema, especialmente si la persona ya tiene problemas con la regulación de la glucosa o la función renal.
Riesgo de aumento de la presión arterial y frecuencia cardíaca: El LSD puede elevar la presión arterial y la frecuencia cardíaca, lo que podría poner un estrés adicional sobre el sistema cardiovascular. Esto es particularmente importante para las personas con diabetes, ya que la presión arterial alta y otros problemas cardiovasculares son más comunes en estos pacientes. Aunque la metformina no afecta directamente la presión arterial, el aumento de la presión arterial y la frecuencia cardíaca inducido por el LSD podría generar complicaciones adicionales.
Efectos sobre la función renal: El uso de metformina está contraindicado en personas con insuficiencia renal debido al riesgo de acidosis láctica. Si una persona está tomando metformina y consume LSD, la combinación podría poner una presión adicional sobre los riñones, especialmente si hay deshidratación o alteraciones en el equilibrio de electrolitos.