Interacciones farmacodinámicas mínimas: No existen interacciones significativas entre fluoxetina y paracetamol a nivel de los mecanismos de acción de ambos medicamentos. Ambos medicamentos actúan de manera diferente en el cuerpo (fluoxetina en el cerebro y paracetamol en el sistema nervioso central), lo que significa que generalmente no interfieren entre sí.
Efectos sobre el hígado: La fluoxetina se metaboliza principalmente en el hígado, y aunque no suele causar daños hepáticos en dosis terapéuticas, puede interactuar con otros medicamentos que se metabolizan a través del hígado. El paracetamol, especialmente en dosis altas, puede causar daño hepático, ya que es metabolizado en el hígado. En combinación con fluoxetina, el riesgo de daño hepático podría aumentar si el paracetamol se toma en grandes cantidades o de manera crónica. Precaución: Es importante no exceder la dosis recomendada de paracetamol (generalmente no más de 4 gramos por día en adultos), para evitar sobrecargar el hígado, especialmente en personas que toman fluoxetina a largo plazo.
Riesgo bajo de interacciones adversas graves: En general, no hay un riesgo significativo de efectos adversos graves cuando se combinan estos dos medicamentos en las dosis recomendadas.