Mezclar Anfetaminas y Lorazepam tiene
un incremento del riesgo y debes tener especial cuidado.

Estas combinaciones no suelen ser físicamente dañinas, pero pueden producir efectos indeseables e inesperados, como malestar físico o sobreestimulación. El uso extremo puede causar problemas de salud física. Los efectos sinérgicos pueden ser impredecibles. Se debe tener precaución al optar por usar esta combinación.

Tipo de sustancias: Depresoras | Estimulantes

En general, la mezcla de drogas suele aumentar los riesgos y efectos impredecibles, por lo que se desaconseja, pero en cualquier caso es crucial informarse bien de antemano para proteger la salud. Nos guiamos por esta categorización de riesgos.

Efectos y riesgos

Mientras que el lorazepam actúa como un depresor que reduce la actividad cerebral, las anfetaminas estimulan el SNC, lo que puede provocar una interacción contradictoria y difícil de manejar, especialmente en dosis altas.

Efectos cruzados: El lorazepam deprime el SNC, induciendo relajación, reduciendo la ansiedad y promoviendo el sueño, pero también puede causar somnolencia, deterioro cognitivo y reducción de la coordinación motora. Por otro lado, las anfetaminas estimulan la liberación de dopamina y norepinefrina, aumentando la energía, la atención y la frecuencia cardíaca. En combinación, las anfetaminas pueden enmascarar los efectos sedantes del lorazepam, y el lorazepam podría atenuar parte de la estimulación de las anfetaminas, lo que puede llevar a un consumo excesivo de una o ambas sustancias.

Sobredosis accidental: Las anfetaminas pueden contrarrestar temporalmente los efectos sedantes del lorazepam, lo que podría llevar a un uso excesivo de una o ambas sustancias para buscar efectos más pronunciados.

Estrés cardiovascular: Las anfetaminas aumentan la presión arterial y la frecuencia cardíaca, mientras que el lorazepam puede atenuar estas respuestas inicialmente, lo que podría generar un estrés adicional en el sistema cardiovascular.

Confusión mental: Los efectos opuestos de ambas sustancias pueden generar confusión, desorientación o dificultad para concentrarse.

Dependencia y tolerancia: El uso repetido de esta combinación puede aumentar el riesgo de desarrollar dependencia física o psicológica a una o ambas sustancias.

Interferencia en el sueño: Aunque el lorazepam promueve el sueño, las anfetaminas pueden contrarrestar este efecto, causando insomnio prolongado y agotamiento.

Si decides usar ambas sustancias juntas, hazlo con extrema precaución, evita dosis altas y mantente en un entorno seguro. Consulta a un médico si experimentas taquicardia severa, confusión extrema, somnolencia excesiva o dificultad para respirar. Esta combinación no es recomendable debido a sus riesgos potenciales.

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Total: 6 experiencias

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Anfetaminas

Anfetaminas

¿Qué es?

Son sustancias estimulantes del sistema nervioso central que incrementan la actividad cerebral. Se utilizan de forma médica para tratar trastornos como el TDAH o la narcolepsia, pero también se consumen de manera recreativa.

Efectos y Riesgos:

El consumo de anfetaminas genera euforia, aumento de energía, estado de alerta y disminución del apetito. Sin embargo, también puede causar insomnio, irritabilidad, aumento de la frecuencia cardíaca y presión arterial. Su uso recreativo o en dosis altas incrementa el riesgo de ansiedad, paranoia, comportamiento agresivo y daños cardiovasculares. El consumo prolongado puede llevar a dependencia, agotamiento extremo, deterioro cognitivo y síntomas psicóticos.

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Lorazepam

Lorazepam

¿Qué es?

El lorazepam es una benzodiacepina de acción intermedia que se utiliza para tratar trastornos de ansiedad, insomnio, convulsiones y síntomas de abstinencia de alcohol. También se emplea como premedicación antes de procedimientos médicos.

Efectos y Riesgos:

Reduce la ansiedad, induce relajación, facilita el sueño y actúa como anticonvulsivo. Puede causar somnolencia, mareos, debilidad muscular, confusión, amnesia y, con uso prolongado, dependencia física y psicológica. La interrupción abrupta tras uso prolongado puede provocar síndrome de abstinencia con insomnio, irritabilidad, ansiedad y convulsiones. Su uso debe ser supervisado y limitado a tratamientos de corta duración.

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