Dosis altas de cafeína pueden causar ansiedad, la cual es menos manejable durante un viaje. Además, dado que ambas sustancias son estimulantes, la combinación puede provocar malestares físicos.
Efectos cruzados: La cafeína puede intensificar la agitación o el nerviosismo que a veces se asocia con el DXM, haciendo que la experiencia sea más difícil de manejar.
Riesgo psicológico: El DXM puede causar confusión, ansiedad o paranoia, especialmente en dosis altas. La cafeína, al ser un estimulante, puede aumentar la actividad mental y la sensación de inquietud, intensificando cualquier malestar emocional o psicológico.
Impacto físico: Ambos compuestos aumentan la frecuencia cardíaca y la presión arterial. Su combinación puede sobrecargar el sistema cardiovascular, especialmente en personas con afecciones preexistentes o sensibilidad a los estimulantes. La cafeína puede aumentar los temblores, mareos o malestar físico que a veces ocurren con el DXM.
Sobrecarga sensorial: El DXM altera la percepción sensorial y puede inducir estados de disociación. La cafeína puede intensificar la sensación de sobrecarga sensorial, haciendo que la experiencia sea más difícil de manejar.
Duración de efectos: Los efectos del DXM suelen durar de 4 a 6 horas, mientras que la cafeína tiene una duración más corta (3 a 5 horas). Esto puede generar un desbalance cuando los efectos estimulantes de la cafeína desaparecen mientras el DXM sigue activo.
Riesgo de sobredosis: En dosis altas de DXM, el riesgo de efectos adversos graves como confusión severa, hipertensión y convulsiones aumenta. La cafeína puede amplificar estos riesgos al aumentar la carga sobre el sistema nervioso central y cardiovascular.