¿Quién fue Alexander «Sasha» Shulgin?

¿Conoces la historia de Alexander «Sasha» Shulgin y estos grandes libros?

El Dr. Alexander «Sasha» Shulgin fue un importante bioquímico que, después de descubrir el primer pesticida biodegradable, se dedicó a investigar nuevas sustancias psicoactivas que pudiesen tener utilidades terapéuticas junto con su esposa Ann, y juntos publicaron el PiHKAL y el TiHKAL con sus experiencias y recetas (pero ni se te ocurra intentarlas en casa, es muy peligroso!)

Además de su uso recreativo, más recientemente su uso terapéutico está muy de actualidad para el tratamiento de depresión, ansiedad, adicciones y estrés postraumático, y muy pronto estarán autorizadas para uso médico controlado en EEUU y Europa (ya lo está en Australia).

Transcripción:
¿Sabías que el creador del primer pesticida biodegradable también desarrolló más de 200 drogas nuevas y publicó libros con sus recetas? Su nombre es Alexander Shulgin, un bioquímico estadounidense de origen ruso que trabajó en la empresa Dow Chemical Company. Allí, desarrolló el primer pesticida biodegradable de la historia, llamado Tectran. El éxito económico de este producto permitió a Shulgin dedicarse a su verdadera pasión: desarrollar y probar nuevas drogas junto con su esposa, Ann, y un selecto grupo de amigos intelectuales.

De hecho, Shulgin es conocido como «El Padrino del Éxtasis» por haber redescubierto esta sustancia casi 50 años después de que la farmacéutica Merck la abandonara. Promocionó su uso como herramienta en psicoterapia para tratar el estrés postraumático y problemas de pareja. Sus descubrimientos, experiencias personales y recetas para sintetizar estas sustancias fueron documentados en dos grandes tomos: el «Pikal» y el «Tikal».

El primero, titulado «Pikal: Una historia de amor químico», explora sus experiencias con las feniletilaminas, sustancias similares a las anfetaminas, incluyendo la MDMA y el 2CB. Esta publicación provocó la ira de la DEA, que desmanteló su laboratorio y le retiró la licencia para producir drogas. En respuesta, los Shulgin publicaron el segundo tomo, «Tikal: La continuación», en el que abordan sus experiencias con las triptaminas, sustancias similares a la serotonina, como el LSD y la psilocibina.

Estos libros son valiosos por las experiencias y reflexiones que recogen, pero es importante destacar que intentar replicar estos procesos en casa es extremadamente peligroso e ilegal. La mayoría de las recetas utilizan ingredientes que ya han sido prohibidos, y la manipulación incorrecta de estas sustancias puede ser letal. No obstante, el tiempo ha dado la razón a los Shulgin. Tras mucha investigación, el uso médico de algunas de estas sustancias psicodélicas está siendo autorizado en psicoterapia para tratar la depresión, ansiedad, estrés postraumático y adicciones, como explico en mi libro «La Guía Esencial del Renacimiento Psicodélico«.

Recuerda que la información es poder, pero también es salud. La ignorancia es lo más peligroso cuando se trata de cualquier sustancia.

El consumo de drogas, legales o ilegales, conlleva riesgos y no es recomendable. Sin embargo, si decides hacerlo, infórmate bien sobre la sustancia, su duración, efectos y dosificación. Utiliza servicios de reducción de riesgos como Energy Control (España), Dance Safe (USA), Kosmicare (Portugal) o Échele Cabeza (Colombia).

Recuerda que la información es poder y salud; la ignorancia es el mayor peligro al tratar con sustancias. Para apoyar esta iniciativa, sigue el canal en redes, comparte los videos o únete a la Comunidad Drogopedia para hacer preguntas, influir en los temas y acceder a contenido exclusivo. También puedes solicitar asesorías personales con Antón y unirte a nuestro canal de WhatsApp o Telegram para estar al tanto de todo.

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